miércoles, 30 de septiembre de 2009

UNA ETAPA FRUCTÍFERA QUE LLEGA A SU FIN: UNA PROVINCIA QUE AVANZA

El pasado Miércoles 22 de Septiembre anuncié a la Comisión de Nuevas Tecnologías de la Diputación Provincial de Huesca mi decisión de cesar voluntariamente en el cargo de asesor en materia tecnológica en la institución provincial. Lo hice con una sensación de tristeza por abandonar un entorno de trabajo inmejorable, una institución modélica y un equipo político y laboral que me ha permitido desarrollar un proyecto ilusionante durante más de seis años, pero lo hice tras meditar la necesidad de emprender una nueva etapa en mi vida profesional, quizás es cierto que las personas tenemos un pequeño reloj que nos avisa de la necesidad de un cambio y en ese reloj a mi me sonó el despertador.

Quiero desde estas líneas valorar y ensalzar el trabajo de la Diputación Provincial de Huesca en el desarrollo de la Sociedad de la Información y la Comunicación en nuestra provincia, dejando claro que esto ha sido una apuesta estratégica de la institución y que mi trabajo en el área ha consistido únicamente en saber engrasar las piezas de una máquina formada por unos políticos que han comprendido perfectamente el beneficio social, cultural y económico de las tecnologías y unos funcionarios que han puesto todo el empeño y esfuerzo para que con unos recursos limitados, los proyectos pudieran cumplir con unos objetivos muy ambiciosos. No quiero que estas líneas sean un ejercicio de egocentrismo, por ello es necesario recordar que han sido instituciones a nivel nacional como el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, o la fundación FUNDETEC, entre otras, las que han reconocido el trabajo de la Diputación.

Resumir el trabajo de los últimos seis años en pocas líneas sería imposible, pero si puedo concluir que con el desarrollo del proyecto Diputación Digital de Huesca conjuntamente con otras iniciativas tanto autonómicas, como estatales, el Alto Aragón ha consolidado unos pilares para construir un futuro esperanzador para la provincia, basado en el conocimiento, la tecnología, la investigación y la productividad. Todo ello bajo una única premisa política e ideológica que ha sido garantizar la igualdad de oportunidades entre el mundo rural y el mundo urbano, que a veces puede sonar a utopía, pero que la hemos tenido presente en cada una de nuestras actuaciones, ya sea en el desarrollo de infraestructuras de telecomunicaciones, los programas de dinamización tecnológica, la creación de servicios públicos digitales en materia turística, o bien el desarrollo de la administración electrónica.

Las últimas líneas las tengo que dedicar a los agradecimientos, empezando por el Presidente, Antonio Cosculluela y los dos diputados con los que he trabajado en el área Ramón Miranda y Luís Gutiérrez, a los que les agradezco su confianza absoluta en los proyectos que hemos iniciado, y los muchos que todavía quedan por desarrollar. Por supuesto a todos los trabajadores de la Diputación por su absoluta complicidad y dedicación, y por último a todos los diputados de la institución provincial y a cada uno de los alcaldes y concejales de la provincia que nos han facilitado que las acciones se pudieran desarrollar en todos los rincones del Alto Aragón.

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